Para enseñar una lengua no basta con hablarla, es importante conocer todas las particularidades de un idioma, pero también todas las vertientes del lenguaje. En este sentido, los profesionales que mejor conocen una lengua son los filólogos y traductores. En este artículo desgranamos las claves para comprender por qué es importante un profesor titulado en estas disciplinas.
Hay muchas personas que cuando quieren aprender un idioma buscan clases con profesores nativos de una lengua, sin tener en cuenta su titulación pensando que esta va a ser la mejor opción. Pero este es un gran error. La mayoría de hablantes de una lengua materna no conocen todas las particularidades de su idioma ni tienen los recursos para su enseñanza.
Hablar una lengua de manera nativa no implica tener recursos para su enseñanza
Que sea tu idioma materno no quiere decir que sepas explicarlo. Hay muchos elementos que influyen en la enseñanza adecuada de un idioma. Para dar clase se necesitan varias destrezas. Un profesor nativo puede dominar la expresión oral, pero hay otras destrezas como la escritura, o las estrategias para la comprensión oral que no controla. Esta es una de las claves que responden al por qué es importante un profesor titulado en la enseñanza de un idioma.
¿Qué nos va a aportar un profesor titulado en el aprendizaje de un idioma?
Filólogos y traductores son los mejores profesionales que pueden enseñarnos un idioma porque conocen todas las vertientes del lenguaje, tanto la expresiva del lenguaje que producimos, como la receptiva del lenguaje que comprendemos.
Estos profesionales conocen a fondo la lengua y además, disponen de las herramientas necesarias para la formación del alumno. Conocen el proceso de enseñanza y la metodología de clase, por lo que son capaces de realizar un análisis de la situación de cada alumno estableciendo cuál es el punto de partida del aprendizaje.
La adquisición de un idioma se lleva a cabo en las diferentes etapas de la vida. Un filólogo conoce cuáles son esas etapas y cómo se van incorporando los elementos del lenguaje y nuestro dominio sobre él a lo largo de nuestra vida, por tanto sabe cómo adaptar el contenido de las clases a las edades de los alumnos.
Un profesor que motive a sus alumnos garantiza el éxito del aprendizaje
Además, el aprendizaje de un idioma no es en línea recta, su avance no es progresivo. Cuando hay un estancamiento en este período de aprendizaje, es fundamental la motivación que nos ofrece el profesor. Que un docente sea más o menos motivador, no depende directamente de su titulación, pero en el caso de los profesores titulados, estos disponen de las herramientas adecuadas para estimular al alumno y que este no pierda el interés durante el período de aprendizaje de una lengua.
A lo largo de los 17 años que lleva en marcha ELECE, nuestra experiencia nos ha demostrado la importancia de un filólogo o un traductor en la enseñanza de una lengua. Por ello en nuestros cursos de español, inglés, francés, italiano, alemán, ruso y portugués, encontrarás profesores titulados en cada una de estas lenguas, que no solo disponen de los recursos y herramientas necesarias para la enseñanza de un idioma, sino que estos además, aman su trabajo y esto se ve reflejado en los buenos resultados que obtienen los alumnos.
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